Responsables de formación, ¡es hora de reflexionar sobre sus propias competencias! Ante las grandes tendencias de la función de formación en las empresas, ¿qué cursos de formación debería seguir en 2022? Philippe Argouges, experto en ingeniería de formación y análisis de necesidades, nos lo explica.
La pandemia parece haber quedado atrás... y la actividad empresarial vuelve poco a poco a la normalidad. Incluso se acelera, con un aumento de las contrataciones. En cuanto a la formación profesional, los dos últimos años dejarán sin duda huella, al menos en lo que se refiere a la formatos de entrenamiento.
Como responsables de formación, has tenido que gestionar un montón de prioridades. Ha llegado el momento de pensar en vosotros mismos, en el desarrollo de vuestras capacidades y en vuestras propias necesidades de formación.
Hay cinco áreas principales de desarrollo para la función de formación corporativa. A continuación le presentamos los cursos de formación que pueden ayudarle a seguir el ritmo de estos avances.
Área 1: Escuchar y asesorar a directivos y empleados
El objetivo de la ley de formación profesional (o más bien de las leyes, debería decir) es convertir a los trabajadores en actores activos de su propio desarrollo profesional. Por ello, cada vez hay más dispositivos destinados a ello: la Cuenta Personal de Formación (CPF), Transition Pro, el Consejo de Desarrollo Profesional (CEP)... por citar sólo algunos.
Pero no necesariamente sabe cómo tratar a los empleados que tienen preguntas, o a los directivos que no están familiarizados con estos sistemas.
Cada vez más, la función de RF evoluciona hacia un papel de asesoramiento. A los directivos, para ayudarles a acompañar mejor a sus colaboradores. Para los empleados, para tener mejor en cuenta sus expectativas y deseos.
¿Cómo podemos asesorar mejor a nuestros empleados?
El primer paso es escucharles. Para ello, la entrevista profesional es una herramienta especialmente pertinente, cuando se utiliza correctamente. Hay que tener cuidado de no confundirla con la entrevista de evaluación anual. No se trata de discutir los objetivos asignados a los empleados, sino de hablar de sus deseos de desarrollo y ver cómo apoyarlos en este proceso.
Formación para ayudarle a escuchar y asesorar
- Realizar entrevistas profesionales.
- Escucha activa para mejorar la comunicación
- Gestión eficaz del cambio, enfoque y herramientas
Ámbito 2: integración de nuevos sistemas de formación profesional
La pandemia ha propiciado la aparición de nuevos métodos de formación. Otros han adquirido una nueva dimensión y se han desarrollado más allá de lo imaginable hace dos años. Presencial, a distancia, itinerarios de formación, blended learning, formación en el puesto de trabajo...
Todos estos sistemas son interesantes. Pero, ¿para qué competencias son los más adecuados? ¿Y en qué situaciones pueden marcar la diferencia para sus empleados?
Para los jefes de proyecto, por ejemplo, podríamos imaginar cursos de formación que incluyan :
- MOOC sobre generalidades ;
- sesiones de formación presenciales o a distancia sobre las metodologías específicas utilizadas por su empresa.
Formación para saber más sobre estos regímenes
- Integración de los MOOC en su sistema de formación
- E-learning, puntos esenciales para el éxito de los proyectos
- Formar de otra manera: gestionar un aula virtual
3: Desarrollar su experiencia como gestor de formación
Si ha heredado la función de responsable de formación sin conocer necesariamente los entresijos de la profesión, sin duda necesita organizarse mejor. También puede merecer la pena reflexionar sobre su actividad, su papel y sus funciones.
En el periodo pospandémico que acaba de empezar, tenemos que ser cada vez más inteligentes. En otras palabras, tenemos que encontrar nuevas fuentes de financiación, utilizar mejor los planes de formación profesional, poner en marcha ofertas diversificadas, integrar proyectos de ingeniería de la formación para adaptar las ofertas a las necesidades y evaluar los resultados.
¿Cómo se hace?
Por ejemplo, con el Cuenta-formación co-construidos.Además de lo anterior, los responsables de formación pueden ofrecer a los empleados la oportunidad de utilizar su cuenta personal de formación para realizar cursos que también sean de interés para la empresa. Y pueden hacerlo durante su horario laboral. Es una situación beneficiosa para todos. En efecto, el empleado invierte parte de su CPF (que recuperará bastante rápido de todos modos) y la empresa invierte el tiempo de trabajo del empleado.
Entrenándote para ver más claramente en tus misiones
- Diseñar y gestionar el plan de desarrollo de competencias
- Construir y gestionar un proyecto de formación.
- Evaluar las iniciativas de formación
Ámbito 4: Comunicación para vender su oferta internamente
El papel del responsable de formación está cambiando.
Anteriormente considerados como contables, ahora son responsables de comprobar que la empresa cumple sus obligaciones, rellenar formularios para validar la financiación y elaborar declaraciones a intervalos regulares.
Ahora, en su papel de consejero de orientación profesional, el responsable de formación se convierte en el defensor de los planes de desarrollo de competencias, vendiéndolos a los equipos. Ya no basta con presentarlos a los órganos de representación del personal: también hay que convencer a los directivos del valor de la formación para todos y destacar los beneficios para los empleados.
Para lograrlo, los responsables de formación deben desarrollar sus capacidades de comunicación.
Formación para comunicar mejor
Prioridad 5: Integrar la oferta de formación en la estrategia de la empresa
La formación forma parte integrante de la estrategia empresarial. Por ejemplo, en un momento en que la contratación es cada vez más difícil, el responsable de formación tiene un papel que desempeñar en el establecimiento de una estrategia interna de desarrollo de competencias.
Pero, ¿cómo hacerlo?
Por supuesto, el desarrollo de la estrategia corporativa no es responsabilidad suya, sino del comité de dirección. Sin embargo, si comprendemos cómo se establece, cómo puede integrarse en el análisis de las necesidades y cómo puede utilizarse la formación para apoyarla, podremos construir una oferta mejor adaptada a las necesidades del mañana.
Una estrategia de desarrollo requiere una gestión adecuada de las competencias. Para ello, hay que trazar un mapa de la situación existente y, a continuación, elaborar un plan de desarrollo de competencias adecuado.
Formación vinculada a los aspectos estratégicos de la empresa
- Estrategia empresarial: análisis, diagnóstico y despliegue
- Implementar una política de formación eficaz
- Analizar las necesidades de formación
Cuando los responsables de formación elaboran planes de desarrollo de competencias, a menudo se olvidan de sus propias necesidades. ¿No se dice que el zapatero suele ser el peor calzado? Ha llegado el momento de cambiar la mentalidad en torno al desarrollo de competencias dentro de la función de RF de la empresa.