Los distintos confines han puesto de relieve la importancia de disponer de un escaparate digital para mantener el vínculo con los clientes o proseguir las ventas. Pero, ¿cómo poner en marcha este tipo de proyectos sin presupuesto ni competencias de desarrollo?
Desde la crisis sanitaria, las empresas que venden productos y servicios se han dado cuenta de lo importante que es la tecnología digital para su negocio. Su supervivencia depende de ello. Y aunque las grandes (con más mercados y más recursos) ya tienen página web, ¿hasta qué punto es más importante que antes que una PYME, una empresa muy pequeña o un autónomo tengan página web? ¿Han aumentado los retos? ¿Son diferentes? ¿Han surgido nuevas oportunidades de desarrollo para las pequeñas empresas que desean adaptarse? Stéphane Bataillard, experto en diseño web, nos da algunas respuestas.
Cambio de paradigma
En la primavera de 2020, un gran número de pequeñas empresas se vieron en la necesidad urgente de crear su sitio web. Hasta ahora, se habían mostrado más bien reticentes a hacerlo, por falta de tiempo, de formación o por razones presupuestarias. Las circunstancias les han obligado a dar el paso. El objetivo era mantener un nivel mínimo de actividad, en función del sector.
Nuevos usos, nuevas oportunidades
Las circunstancias han revolucionado el comportamiento de compra y el uso de los medios de comunicación. La explosión del comercio electrónico y el teletrabajo son prueba de ello. Trabajar a distancia es ya algo habitual. Del mismo modo, una oferta comercial, sea cual sea, debe poder consultarse en línea.
Nuevos retos
Esta revolución ha dado lugar a nuevas necesidades: mayor dominio de las técnicas de diseño web, autonomía, seguridad y visibilidad. Más que nunca, estos son los factores cruciales para el éxito de un proyecto web. Satisfacer estas necesidades significa que el gerente de una PYME o autónomo puede dedicarse a desarrollar su negocio con tranquilidad, y puede afrontar mejor situaciones de crisis como la que hemos vivido.
La técnica al alcance de su mano
Para los no especialistas, un proyecto de sitio web supone a menudo toparse con una serie de ideas preconcebidas. Todos los aspectos técnicos implicados parecen inaccesibles para los neófitos, y eso es precisamente lo que tiene que cambiar. Una vez demostrada la importancia de la presencia digital, es hora de entender de qué estamos hablando y atreverse a dar el paso.
El código abierto al rescate
Antes de la crisis, una supuesta inversión financiera importante, una aparente complejidad técnica, el miedo al cambio... podían ser falsas buenas razones para que las PYME y los autónomos aplazaran la creación de su sitio web. Pero las tecnologías ya existían y eran eficaces. Fáciles de aplicar, de código abierto y, en su mayoría, baratas o gratuitas, resultaron ser un recurso saludable.
CMS y redes sociales
Los principales CMS del mercado (WordPress, Drupal, Joomla!, PrestaShop, etc.), así como las herramientas SAS (Shopify, Wix, etc.), demostraron su madurez en este evento. Combinadas con el impacto de las redes sociales, también han demostrado que son bazas para el desarrollo. Cada una de estas soluciones ofrece ventajas en función de su ámbito de utilización (comercio electrónico, blog, etc.).
Requisito profesional
Hace tiempo que crear un sitio web está al alcance de todos. Incluso para quienes no son profesionales de la web. Pero hay que entender el mundo de Internet y de las páginas web. Por eso, además de adquirir unos conocimientos técnicos mínimos para poder utilizar las herramientas, es importante tener en cuenta que Crear su propio sitio web no es un fin en sí mismo, sino el comienzo de una aventura que puede transformar el modelo de negocio de cualquier empresa, por pequeña que sea..
¿Necesita ser informático para crear su propio sitio web?
No hace falta ser informático para crear un sitio web. Pero sí es necesario adquirir un nivel mínimo de conocimientos. Comprender cómo funciona una herramienta empresarial estratégica es crucial. Tranquiliza a los directivos y les ayuda a tomar las decisiones correctas.
Lo que necesita saber para crear su sitio web
Se trata de saber almacenar datos en un servidor (entender las fórmulas de alojamiento), saber navegar por un back office... pero eso no es todo.
Saber identificar el papel que desempeña cada lengua o tecnología, ser capaz de comprender la función que desempeña el sitio en una estrategia global de comunicación e integrar las cuestiones de seguridad son los elementos clave. Le ayudarán a comprender cómo integrar este nuevo escaparate digital en el corazón de su estrategia de comunicación.
Lo decisivo...
El responsable de una pequeña empresa o un autónomo debe saber elegir bien para dimensionar correctamente su sistema en función de las capacidades y necesidades de su empresa. ¿Debe elegir un proveedor de servicios para construir su sitio? En caso afirmativo, ¿con arreglo a qué criterios (presupuesto, agencia o autónomo, pliego de condiciones, planificación del proyecto, seguimiento, etc.)?
¿Debería formarse y crear su propio sitio? Si puede, ¿debe contratar a alguien que se encargue de ello? ¿Cómo ganará visibilidad el sitio?
Es importante recordar queun sitio requiere competencias diferentes. Elegir un modelo de desarrollo significa ser consciente de que detrás de ese futuro sitio hay necesidades de desarrollo web, SEO, redacción web, diseño gráfico, gestión de comunidades (para estrategias multicanal), etc.
Una transición digital acelerada
Durante la crisis sanitaria, estas preguntas fueron cruciales para los líderes empresariales. Tenían que encontrar soluciones para adaptarse al nuevo contexto. Mientras que en el pasado había sido posible en algunos casos evitar estas cuestiones con una buena red de clientes, el aislamiento en el que se encontraron de repente algunas pequeñas estructuras les hizo enfrentarse a ellas.
Formación y soporte
La formación y el apoyo fueron la respuesta a estas preguntas. La formación permite darse cuenta de las implicaciones que tiene para una pequeña organización la implantación de un sistema digital. Ese es el quid del problema. Sobre todo, adaptarse ha significado aceptar dar un paso atrás para plantearse con calma un replanteamiento de su modelo de negocio.. Y proyectarlo, a menudo en contra de ideas preconcebidas (es demasiado complicado, demasiado caro, lleva demasiado tiempo...), hacia otra dimensión.
Dar un saludable paso atrás
En este sentido, los distintos periodos de reclusión han sido saludables. Permitieron a los responsables de las EVE/PYME y a los autónomos tomarse el tiempo necesario para dar un paso atrás. También fue la ocasión perfecta para tomarse el tiempo de aprender, comprender y asimilar. Algo en lo que pocos habían pensado o eran capaces de hacer antes. Y para abrir nuevos horizontes.
Para las organizaciones que se han atrevido a afrontar estos problemas reaccionando en el momento oportuno (es decir, al principio de la crisis), esta transformación digital acelerada ha sido vital. No solo les ha permitido superar una crisis sin precedentes, sino también prepararse para el futuro. Cada vez más VSE y PYME están equipadas digitalmente y han puesto en marcha proyectos cruciales para su supervivencia.
Algunas cifras, según Francia num 2021 barómetro
- 66 % de las empresas encuestadas tienen un sitio web de presentación de su actividad, excluidas las redes sociales. Esta cifra contrasta con las 37 % de antes de la crisis, lo que supone un aumento de 29 puntos.
- 43 % disponen de una plataforma de intercambio de documentos en línea entre empleados. Esto contrasta con las 17 % anteriores a la pandemia, lo que supone un aumento de 26 puntos.
- 29 % utilizan referencias de pago en Internet. Esto contrasta con los 15 % anteriores a la crisis COVID-19, lo que supone un aumento significativo de 14 puntos.
- 33 % utilizan herramientas de colaboración profesional. Esto contrasta con los 21 % anteriores a la epidemia, lo que supone un aumento de 12 puntos.
- 20 % tienen su propio sitio web de venta online, frente a 9 % antes de la crisis, lo que supone un aumento de +11 puntos.
Estas cifras demuestran claramente que embarcarse en un proyecto digital está al alcance de todos, y sobre todo es una iniciativa prometedora para empresas de todos los tamaños. Sea cual sea su tamaño, su ambición y sus competencias, un sitio web es factible, siempre que se haga la inversión adecuada (tiempo, preparación, presupuesto).