Cambio climático, preservación del medio ambiente, gestión sostenible de los recursos... Las preocupaciones ecológicas ocupan cada vez más espacio en la vida empresarial. Muchos de ellos adoptan un enfoque de RSE o buscan perpetuar sus acciones en este ámbito. Pero emprender el camino hacia el desarrollo sostenible no es tan sencillo. Quiere implementar un enfoque eco-responsable dentro de su empresa: ¡aquí le presentamos algunas formas de comenzar!
1. Gestionar mejor los recursos energéticos
- hacer un balance del gasto energético
- proponer alternativas cuando existan
- Reducir los residuos: papel, electricidad, agua, equipos informáticos, vasos, etc.
2. Implementar una política de compras responsable
- firmar la carta de “compras y relaciones con proveedores responsables” de RFAR y obtener la etiqueta
- cambiar el modelo de consumo: reducir el impacto ambiental de las compras, promover la economía local, pensar en términos de “coste global”
- utilizar productos procedentes de bosques certificados PEFC, recursos renovables, etc.
- no ceder ante el mercado de la obsolescencia programada
3. Repensar la organización de la empresa
- promover métodos de trabajo eco-responsables: teletrabajo, etc.
- invertir en infraestructuras y equipamientos: vehículos híbridos de empresa, garajes para bicicletas, etc.
- renovar edificios
- Fomentar el uso del transporte público, el carpooling, etc.
- favorecer el alquiler o la suscripción de equipos
4. Desarrollar proyectos eco-responsables
- elegir socios basándose en un enfoque eco-responsable
- montar un huerto urbano, un proyecto vegetal, un huerto comunitario…
- involucrarse en iniciativas solidarias
5. Política social de la empresa
- sensibilizar y formar a los empleados
- emprender un proceso de inclusión: discapacidad, reintegración, etc.
- comunicar sobre el desarrollo sostenible